Si bien la era digital ha facilitado que podamos realizar gran cantidad de tareas y acciones, sin estar presente en el lugar donde se llevan a cabo realmente, también ha dificultado nuestra capacidad de desconexión y el “ no estar disponible “ no es una frase fácilmente aplicable en nuestra vida diaria.

Dentro del ámbito laboral, una simple conexión a internet nos permite desarrollar nuestro trabajo desde cualquier lugar del mundo. Correos electrónicos, video llamadas y mensajes instantáneos facilitan nuestra actividad y permiten una respuesta rápida e inmediata. Pero estos medios modernos de comunicación no entienden de horarios laborales, y debemos hacer uso del derecho a la desconexión digital a fin de garantizar un tiempo de descanso real y necesario.

Por ello, con la última reforma del Reglamento General de Protección de Datos , se añadió también una alusión a este derecho, regulando las actuaciones para cumplirlo.

En concreto, el texto legal de esta ley expone que todo empleado tendrá derecho a la desconexión digital fuera de su horario de trabajo, lo que implica el no tener la obligación de responder a correos, llamadas o mensajes instantáneos durante su tiempo libre.

La ley incluye algunas acciones por realizar al término de la jornada laboral, tales como: cerrar las sesiones de los correos de empresa y restringir el acceso fuera del horario laboral, dejar en el centro laboral los teléfonos y otros aparatos de localización. También se incluyen los elementos de geolocalización que poseen algunos vehículos de empresa, restringiendo el acceso a los datos durante los periodos de descanso.

Lejos de los que muchos de nosotros pensamos, el “sentimiento de culpabilidad “por creernos ante el “deber” de realizar nuestro trabajo sea cual sea la hora del día, existe, y es común que se traduzca en stress y ansiedad para aquel trabajador que se ve con la obligación de atender las necesidades de la empresa en cualquier momento.

Por ello, es de vital importancia el concienciar a trabajadores y empresarios sobre lo beneficioso que puede ser para ambos el respetar estas medidas, aunque, como en todo en este mundo, hay quienes prefieren seguir conectados 24h, ya que dependiendo del sector empresarial del que hablemos, la flexibilidad para poder trabajar en cualquier momento que lo necesiten, es esencial.